
VASALLOS, MEDIOCRES
Y EXPOLIADORES
La racionalidad es un derecho de todo ser humano, pero no prerrogativa de todos y menos de gente cretina e ignorante. Dicho esto, por causa de tal inherencia detrimental en ciudadanos de muchos países en los que por herencia idiosincrática y falta de oportunidades, la ignorancia fue acondicionada en el espíritu de los vasallos, de los marginados, de los que no fueron beneficiados con el derecho de aprender. De los que sí fueron viciados por estar embebidos y sometidos a vivencias con pocos haberes conceptuales que lo encauzaran por los caminos de este derecho a la adquisición de conciencia. Individuos que no tienen por ello las capacidades de justipreciar conductas honorables, emulaciones de hombres y mujeres que sentaron pautas en el transcurso de la historia honrando las dignidades y señalando el camino que conduce hasta la honra, la circunspección y la honorabilidad. El ejemplo fue la base colocada de ejemplo por un Mahatma Gandhi, Nelson Mandela, Martin Luther King Jr. Y otros paradigmas de la humanidad.
A estos memos reseñados, los anteriores, los que no escriben la historia, los acondicionaron a ser portaestandartes inanes de la ignorancia, de cuya dimanan sus desacertadas y pueriles conceptualizaciones, creyendo ser doctos en cualquier tópico que se dilucide, vayan las siguientes observaciones:
Nunca ha sido prerrogativa contemplada por ejemplo en La República Dominicana, el derecho a obtener buena educación; permitir al detalle intelectual entrar como conciencia en los vasallos, porque adrede fue conveniencia de los potentados ególatras de siempre, de los dueños de esclavos a los que deseaban y desean ignorante. No ha sido el interés del círculo vicioso de ricos dinásticos tradicionales. En algunos países como el reseñado, el mantener a la clase trabajadora sometida a la ignorancia les ha permitido el vasallaje ignominioso con fines mezquinos: El aprovechamiento del esfuerzo laboral como medio usufructuario en pro del enriquecimiento y la explotación. Si faltos de honorabilidad los explotadores, faltos de dignidad los explotados. Ello, precisamente porque el nutriente intelectual consumido desde siempre ha sido nefasto para la racionalidad individual del hombre y mujer dominicanos. Nuevos ricos producto de latrocinio, depredación, peculado pertenecen a esta clase baja de la Sociedad dominicana, pero que por cínicos y descarados han escalado posiciones mediáticas. Nuevos ricos mediocres, que aumentan sus caudales por concepto de sus modelos de gestiones ilegales. En este caso me refiero a nuevos narcotraficantes, sicarios de las drogas, mercenarios del crimen en todas sus manifestaciones. Ambos grupos, los de las dinastías y los ricos mediáticos son responsables por la ignorancia de la plebe, del vulgo que es mayoría, del universo resignado de idiotas que sobrevive con las migajas que caen de las mesas de los comensales que conforman un grupo integrado, pero subdividido: Los políticos, usufructuarios, ladrones y depredadores de siempre. Los ricos por sucesión dinástica. Los ricos mediocres, los que voluntaria y maliciosamente se dedicaron al tráfico de estupefacientes, a los sobornos, extorsiones, secuestros, robos, asesinatos, a la trata de blancas y comercio ilícito de órganos infantiles. Como adeptos a las causas del narcotráfico: Los militares de carreras y de altas jerarquías, que asociados a los carteles de las drogas, derivan grandes ganancias y se hacen ricos pertenecientes al
grupo de los mediocres. Al grupo de los mediocres, porque también fueron acondicionados y egresados en las escuelas de la ignorancia y los malos haberes culturales. Los militares dominicanos reciben adiestramientos militares preparados para la guerra. No reciben educaciones conceptuales y sus disciplinas van orientadas a responder a un toque de Diana o a la represión contra ciudadanos. Muy poca orientación sobre los Derechos ciudadanos. Basta con someterlos a escrutinio para comprender que son una pléyade de ignorantes, que demasiadas veces ni siquiera conocen sus oficios, sus prerrogativas, el Derecho ciudadano. Son neófitos en cualquier campo de la intelectualidad sin importar Jerarquías individuales. Pero, esto no es solo en República Dominicana. Otros países cuentan con Fuerzas Armadas compuestas por individuos provenientes de las Sociedades plebeyas, carentes de buenos haberes conceptuales.
Sobre la clase plebeya, los que solo saben mirar como el cerdo con la cabeza baja y hacia el fango. Como los nuevos ricos del narcotráfico, que habiendo encontrado estiércol creen haber hallado oro y se sienten ricos dentro de sus concupiscencias y derivadas miserias en el espíritu. Como los ricos de usufructo, latrocinio y depredación, que irrespetan la honorabilidad haciendo ostentación de una baja calidad moral que corroe sus entrañas porque los separa gran distancia de la honra. Y sobre la clase de ricos por sucesión histórica, que usufructan el sudor de las frentes de los trabajadores, los explotadores laborales. ¡ Lástima de pueblo incapaz de separar la paja del trigo!. ¡ Lástima de actitudes dubitativas de gente que no sabe trasegar sus realidades históricas para crecer y emanciparse de una esclavitud aberrante!... la del cretinismo inherente a la mediocridad por causa de ignorancia. Sobre todos ellos recaen las culpas y ni se hable de futuro emancipador, que esto es como un sello indeleble en la idiosincrasia de este pueblo que sabe caminar… en reversa como el cangrejo.
La historia dominicana resulta ser desgraciada cuando retrotrae los patrones irracionales de seres que aunque fueron héroes legendarios, no legaron nada de sus hechos protagónicos y epopeyas, porque éstas no fueron acompañadas con modelos de gestiones que introdujeran en el espíritu y la mente dominicana el pensamiento racional. Eugenio María De Hostos casi tardíamente lo intentó infructuosamente. La educadora Ercilia Pepín otro tanto de su tiempo dedicó a seguir tal modelo de gestión, pero sus alcances didácticos no llegaron hasta los vasallos ignorantes. Una historia, la dominicana, que refleja inherencias revolucionarias en sus ciudadanos, de cuyas hay pocas conclusiones con tendencias emancipadoras, pero que se convierten en retóricas patrioteras y cacareos anuales que no llegan precisamente por esa carencia dogmática de cultura educativa y disciplinaria con buenos haberes conceptuales. Solo cuando afloran intereses demagógicos y personalistas sobre el supuesto celo patriótico, ostentado cuando se pretende ser más patriota que dominicano, a hurtadillas, y las afectaciones personales disciplinarias reflejan lo contrario, aplauden. Ha resultado ser desgraciada también, por las afectaciones sociológicas de una pléyade de ignorantes sobre los procesos de desarrollo Institucionales, que han trastocado desgraciadamente los resultados que hoy se han obtenido. Resultados que son más que lo que pueda merecer un país lleno de gente incapacitada para discurrir y discernir bien sus verdaderas conveniencias. Una muestra de siempre, una muestra muy tipificada de ello es…el cambio de chinas por botellas al que han sido acondicionadas. El método lucrativo de los potentados es precisamente por acondicionamiento y los cretinos e ignorantes ni siquiera lo perciben.




