
TAL CUAL
ENUNCIADO: En el mundo existen tan solo dos clases de personas: Los más equivocados y los menos equivocados. Durante el transcurrir de la vida para diferentes generaciones de individuos se obtienen cúmulos de vivencias medioambientales. A este cúmulo de vivencias se le denomina cultura. Dependiendo de las diversidades ambientales y sus propias adquisiciones tradicionales educativas, disciplinarias, existenciales, místicas, religiosas, se adquieren mejores o peores vivencias y de estas dimanan las equivocaciones o las aclaraciones conceptuales. Las absorciones de mejores razones y las inclinaciones hacia la búsqueda de la verdad sometida a consenso, a comparaciones, a racionalidad y justiprecio, dictaminan la ubicación individual respecto a cualquiera de los dos grupos. Así, los que adquieren criterios sometidos a escrutinio racional pueden pertenecer al grupo de los menos equivocados. Los que fueron sometidos simples acondicionamientos, los que fueron inyectados de místicas y tabúes, los que no tuvieron oportunidad de cuestionar, los que preguntaron y nunca fueron respondidos con verdades por carencias de estas en algunos medios o por malos enfoques patriarcales pasarán a formar parte del grupo de los más equivocados. Esta segregación es importante, porque las claridades conceptuales no son transigentes y no tienen porqué amoldarse a las equivocaciones. Siempre será deseable pertenecer al grupo de los menos equivocados. Tratar de hallar fragmentos de verdad en una búsqueda de convicciones a tenor con la creación de conciencia, es encaminarse a pertenecer a este grupo.
Por: Franklin Olivo (copyright)
ENUNCIADO: Los colores no existen, son niveles de brillantez. Al que llamamos blanco es el nivel más alto de brillantez. Al que damos en llamar negro, es el nivel más bajo de brillantez. Entre mayor nivel de brillantez y menor nivel de brillantez hay una gama de llamados colores que por inexactitudes del cerebro vemos más o menos intenso determinado nivel de brillantez. No todos pueden ver un nivel de brillantez idéntico, porque a veces pende el aprecio hasta de las emociones. El cerebro es quien tiene la capacidad de descifrar niveles de brillantez y asignar colores.
Enunciado: El frío no existe. Existe ausencia de calor. En un refrigerador por ejemplo lo que se lleva a cabo para producir eso a lo que llamamos frío es expulsar el calor de dentro hacia afuera y eso produce un vacío de calor al que le llamamos frío, principio base para el estudio de refrigeración doméstica o comercial.
ENUNCIADO: Los ojos no ven. Los objetos inciden en ellos y esas incidencias son llevadas hasta el área cognitiva del cerebro, lugar en donde se procesan las imágenes y se conceptualizan, de tal suerte que quien ve es el cerebro. Los ojos son cámaras oculares que captan imágenes sin poder conceptuarlas o determinarlas. A través del nervio óptico se envían codificadas esas imágenes y el cerebro se encarga en descifrar los códigos y en contextualizarlos y finalmente conceptuarlos. Eso sucede en fracciones millonésimas de segundos. Si se enfocan los ojos en un objeto nunca antes visto, este busca en sus archivos cognitivos imagen similar o parecida a un símil almacenado para determinar si algo la identifica con éstos. Al no hallar respuesta en ocasiones, debe recibir esa información cognitiva para desde entonces poder reconocerla. Si la vuelven a enfocar al tiempo, el cerebro buscará en los archivos y con algún escepticismo puede que la recuerde, simplemente recuerde la imagen y no el nombre o ambas cosas si quedó bien plasmada por impresionismo en la primera vez. De manera que por asociación el cerebro busca identificar los objetos.
COMPLEJO DE MEMORIA: La memoria es cognitiva por asociación. Si deseas recordar cada artículo que vas a comprar en una tienda de abarrotes sin utilizar papel escrito, solo tienes que crear asociaciones asimétricas entre los objetos aunque sean arbitrarias. Por ejemplo: Para recordar cebolla, basta con asociarla con una bombilla, pero con alguna particularidad exagerada que es el óbice para recordarla. Puedes pensar en una bombilla tan grande como un auto, o tan pequeña como una hormiga, pero con una luz tan potente como la de un farol. Si quieres recordar por ejemplo una libra de pan, puedes imaginar que la bombilla viene metida dentro del pan, incrustada en él. Así ya tienes cebolla y pan. Así arbitrariamente vas preparando una mezcla de imágenes asociadas con el producto que vas a comprar. No se te quedará ninguno por comprar, porque por ejemplo: Al pensar en la bombilla, que significa cebolla, a la vez recordarás el pan, porque la bombilla estaba metida dentro del pan, es decir, la cebolla estaba metida dentro del pan y así sucesivamente. Prueba que funciona y jamás lo olvidas. Si también ibas a comprar leche, puedes imaginar que la mitad del pan está llena de leche que fue vaciada para no olvidar. Con este tipo de asociaciones nunca olvidarás nada.

