EL QUINCALLERO
En la calle de las preocupaciones del ser, tiene quincalla un señor que revestido de todo vende cualquier cosa que le parezca, según las necesidades que el cliente posea, aunque este no se quiera dar por enterado de ellas.
Parecer de sabios que su inteligencia le otorgó, así pueda defenderse sin abogados ante las cortes de la vida, por causa de su experiencia y racionalidad. Hállele usted que es el perdido, motivo de su necesidad de comprar porque el tal quincallero siempre es hallado, razón justa de su sabiduría y más por la naturaleza de sus ofertas y precios convenientes al comprador.
Virtudes vende quien tales aprecios lleva consigo, liviana carga al pregón que poco vende por virtuosos sus productos, que no compra virtudes quien más las necesita, así convierta en pesada aunque liviana, la carga de la venta por muy cargada.
Dignidad sobresale de su canasta que vender quisiera a quien no tiene, así no le falte, que es lo último que perder se debe. Muchos la desprecian, motivo de sus miserias aunque pregonan tener baúles llenos de ella. Desnudez del espíritu que sin almilla ostentan pechos abiertos al aire, afán desmedido de parecer dignos. Verde se aprecia su color cuando madurar no quieren en la desnudez por falta de aprecios, honras y honestidades. Lástima que las salvedades no hacen la regla de un tiempo a esta parte, preocupación del quincallero, que vender quisiera la cantidad más imposible, no por cuantiosa pero sí por digna y honrosa.
¡ Dichoso aquél que la lleva en fueros, así la vergüenza le asista, que pudor no es candor en su reclamo cuando hiciera falta recuperarla de manos del vituperio !.
Razón le asiste al quincallero, que regala honra cuando dignidad vende, pues la una sin la otra no caminan por aquello de que,... " ser dignos a mucha honra " forma complemento de una virtud por muchos en desuso, haber del espíritu que la reclama para su satisfacción y contento.
Altruísmo también pregona a voz en cuello su honestidad, que sincera y en vigilia de sus condescendencias, las cuales rechazan malas voluntades y desprecios anímicos, sinrazones a cuestas de hombros en desgracias por tener que soportar tan pesadas cargas. Altruísmo que le asiste a él también, así no pueda y quiera sentir odio malsano, funesto por envidioso y relevante del ánimo, que solicita para el prójimo lo mejor en las voluntades, razón áurea, acopio de virtudes y por tales, de amor benigno según implante Divino al Ser humano.
Recorrer y discurrir sobre virtudes deseables pero rechazadas por miserias espirituales y aberraciones que desprecian valores dizque por antiguos. Desarrollo vil y microcéfalo de las voluntades amorosas en contra de un género del que se reclama Ser.
Así,... pregonando sus virtudes, aprecios, honras, dignidades, altruísmos, empatías y buenas voluntades del amor se acerca ocaso de la tarde, umbral de la noche, trayecto y discurrir laxativo del cuerpo en Beta, que recupera el ánimo de las fuerzas, para enfrentar recurrente las imperfecciones del Ser, toda vez que se pueda,... en aras de las virtudes honrosas necesarias para ratificar nuestra semejanza con Dios. Dogma de fe que me asiste racionalmente según definición apologética de la verdad de tal.
